tag:blogger.com,1999:blog-7436002424561408843.post9024814460372509659..comments2024-02-26T13:41:18.311-08:00Comments on Zapatos de ante azul: Los señores de los anillos (2)Ricardo Signeshttp://www.blogger.com/profile/05833175541431964088noreply@blogger.comBlogger7125tag:blogger.com,1999:blog-7436002424561408843.post-79565677724161369492011-02-26T04:01:52.281-08:002011-02-26T04:01:52.281-08:001. Respecto a la puesta en escena nazi, amigo Anón...1. Respecto a la puesta en escena nazi, amigo Anónimo, Hitler y los suyos tuvieron mucho y bueno donde aprender. Las películas expresionistas de la República de Weimar les enseñaron la importancia del decorado. A diferencia de lo que ocurrió en el cine de vanguardia soviético, en el que lo que contaba era el contraste entre plano y plano, en el alemán el meollo estaba dentro del mismo plano. Para abundar en esta estética en relación al nazismo hay que leer "De Caligari a Hitler", de Sigfried Kracauer.<br />2. Y respecto a Holmes, Huguet, puede que no tuviera remedio como paciente de psicoanálisis, pero como personaje litetarario, no solo resucitó por clamor popular, sino que después de muerto Conan Doyle se metamorfoseó por lo menos dos veces: una en un monje franciscano del siglo XIII apellidado como un conocido sabueso -Guillermo de Baskerville- y otra como un médico listillo y colgado de una serie televisiva cuyo apellido empieza y acaba con las mismas letras que las suyas.Ricardo Signeshttps://www.blogger.com/profile/05833175541431964088noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-7436002424561408843.post-32066005752830952232011-02-24T09:32:44.402-08:002011-02-24T09:32:44.402-08:001.Hombres de poca fe. Os remito las pruebas de que...1.Hombres de poca fe. Os remito las pruebas de que el paciente Holmes es un caso perdido, tal como ha diagnosticado el propio doctor Freud. Los datos provienen de la película "Elemental, doctor Freud" (Por el título alguien podría pensar:¿Quién psicoanaliza a quién?) Les remito un resumen del argumento:<br />“En el año 1890, el famoso detective Sherlock Holmes se ha convertido en un cocainómano que malvive en Londres. Después de una larga ausencia, su inseparable compañero, el Doctor Watson, vuelve a la capital inglesa para visitarle. Cuando llega a su casa, se encuentra a un Holmes paranoico, pálido y que desconfía hasta de su fiel amigo. Preocupado por su adicción a las drogas, Watson decide llevar al maestro de la deducción a Viena, donde vive el joven psicólogo Sigmund Freud, con la esperanza de que éste le ayude a superar su adicción. A través del psicoanálisis y la hipnosis, Freud intenta curar a Holmes, mediante un tratamiento difícil y tortuoso para adentrarse en el subconsciente del detective. Durante su recuperación, Holmes conoce a otra paciente del doctor Freud, Lola Devereaux, una actriz de teatro que se encuentra completamente traumatizada y que es incapaz de articular palabra. Poco después, Freud y Holmes se ven obligados a resolver un caso de secuestro en el que está involucrada la actriz...”<br />2.Como ven, la relación entre nuestro detective y el doctor Freud viene de largo y si no me creen pueden comprobarlo en un artículo titulado "El doctor Freud y Sherlock Holmes" en el que se compara el psicoanálisis con el método holmesiano. Les remito el lead: "Las coincidencias en el método y en la casi milagrosa perspicacia no parecen casuales. ¿Qué hay entre el psicoanalista austriaco y el personaje de Arthur Conan Doyle? Un análisis, tan minucioso como los suyos, puede aportar algunas pistas." La dirección es: http://www.elmalpensante.com/index.php?doc=display_contenido&id=1035Joaquín Huguethttps://www.blogger.com/profile/11056384046800197422noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-7436002424561408843.post-72861341379013473772011-02-23T09:49:08.731-08:002011-02-23T09:49:08.731-08:00Interesante lo de que la Alemania en ruinas era un...Interesante lo de que la Alemania en ruinas era un escenario. Me ha venido a la memoria un reportaje que se titulaba “La Música en el Tercer Reich” en el que compara al nazismo a una gran puesta en escena wagneriana. Hitler quería hacer de la nación alemana una obra de arte y ya se sabe, para que una buena novela salga adelante, hay que eliminar algún personaje que desentone en el guión. Creo que los estalinistas quisieron hacer otro tanto en la Rusia soviética y “no les quedó mal”, si atendemos a los gestos triunfalistas y a los desfiles majestuosos, por no hablar de algunas pinturas que tal vez se habrían colado en algún museo del Pueblo Alemán, sin que se notara la diferencia, sólo con cambiar alguna que otra banderita y el color de la ropa. Lo del decorado me sugiere también los cuentos góticos de Hoffmann y Poe en los que los escenarios tienen mucho de decorado y, aunque nos parezcan de cartón piedra, no dejan de sobrecogernos por ser precisamente eso: emanaciones de nuestras pesadillas.Anonymousnoreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-7436002424561408843.post-38128395872564349392011-02-23T05:27:48.290-08:002011-02-23T05:27:48.290-08:001. Recuerdo haber leído hace tiempo un comentario ...1. Recuerdo haber leído hace tiempo un comentario despectivo sobre la consideración que tenían los nazis -algún jerarca nazi, se entiende- sobre los ingleses en el cual se oponía la impetuosidad ciega de los alemanes a la actitud flemática de unos señores con paraguas. Por desgracia no puedo precisar ya el autor ni el libro donde lo leí, pero se me quedó el sentido de la apostilla del autor, que le daba la vuelta a la valoración nazi, situando aquel rasgo del carácter inglés como uno de los pilares de su democracia. Y ahora que escribo esto me viene que ni pintada una observación de Víctor Klemperer en su estupenda "Lingua tertii imperii -la lengua del Tercer Reich-" cuando explica que el adjetivo "fanático" cobró un matiz encomiástico para aquellos alemanes. O sea..., que vivan los paraguas.<br />2. Estimado Anónimo: me sumo a tu indignación y añado una objeción a lo que escribe Huguet:<br />no es a Sherlock Holmes a quien debería haber psicoanalizado Freud, sino al doctor Watson.Ricardo Signeshttp://www.zapatosdeanteazul.comnoreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-7436002424561408843.post-60601731327144840682011-02-22T09:18:39.419-08:002011-02-22T09:18:39.419-08:00¿Qué tendrán que ver nuestros monclovitas con esto...¿Qué tendrán que ver nuestros monclovitas con estos asesinos a gran escala como Hitler y Goering? No frivolicemos. La simple mención está fuera de lugar. Y que yo sepa Lavapies no tiene vistas a la Sierra de Guadarrama, tal vez para que algunos de nuestros dirigentes no les dé el síndrome de altura... Existe el síndrome de Jerusalén ¿Y el de Berchtesgaden? En ese caso habría que clausurar las visitas a Baviera por su alto índice de peligrosidad. Ya se sabe de las consecuencias de una excursión a las pirámides de un corso bajito y con muy mala leche. ¡Cuidado, mucho cuidado con los tipos bajitos! Son los principales candidatos al síndrome de altura.Anonymousnoreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-7436002424561408843.post-58604469033038415742011-02-21T23:24:10.400-08:002011-02-21T23:24:10.400-08:001. No cargues, Ricardo, con más trabajo al doctor....1. No cargues, Ricardo, con más trabajo al doctor. Dicen las buenas lenguas que llegó a psicoanalizar a alguien tan retorcido como el mismísimo Sherlock Holmes. Y con respecto a estos señores -¿vikingos con frac?- que mencionas, el que esté libre de pecado que tire la primera piedra, pues como demuestra un libro titulado “Aquellos enfermos que nos gobiernan” de las taras mentales no se libran políticos tan populares como Kennedy o Roosvelt. El propio doctor Freud, cuando emigró a Londres, comentó que la civilización había progresado mucho, porque antes lo habrían quemado a él en persona y no a sus libros, como hicieron estos caballeros. ¿Qué me dicen? ¿Qué guardaban más de un cadáver en el armario? De la misma manera que un general americano no encontró fascistas en Italia, tampoco los halló en Alemania. Contaban algunos observadores que aterrizaron en las ruinas del Tercer Reich- algo que tenía mucho más que ver con un escenario teatral que con un país- que no había ningún alemán que no hubiera ocultado un judío en su casa o que hubiera ayudado algún perseguido del régimen nazi; ya ves, en el fondo son buena gente estos germanos. Pero, claro, ya se sabe, alguno tenía que cargar con el muerto y estos señores tan elegantes pagaron el pato. <br />2. Le pides al doctor Freud que psicoanalizara a estos personajes. Esto es un imposible. El problema es que este señor tendría que haber psicoanalizado a millones de alemanes y quizás europeos. E.T.A. Hoffmann diría que fueron las propias “fuerzas telúricas” de la naturaleza quienes los auparon; lo mismo habría subrayado Carlyle en “Los Héroes”. El propio Freud hizo un amago en su ensayo sobre las masas y sus discípulos, Fromm y Adler, profundizaron en el asunto- por no mencionar a alguien que no era de su cuerda pero quizás más brillante, Elías Canetti-. Creo que el tratamiento no funcionó, porque en Austria, la tierra natal del doctor, los neonazis son una de las fuerzas más importantes. En Viena, los conciudadanos del doctor colaboraron activamente en la limpieza de estos vecinos “indeseables”. Y parece que no se ha arrepentido de esta labor de limpieza, porque... porque no fueron ellos sino los “ocupantes” alemanes quienes hicieron el trabajo sucio. <br />3. Y nuestros políticos, ¿padecen alguna enfermedad? La más conocida es el “Síndrome de la Moncloa”. Nada complicado, algo que se cura con una estancia en el barrio de Lavapiés, en un piso modesto con vistas a la calle. Podríamos ampliar el circuito con el Raval de Barcelona o, para tirar a nuestros lares, el barrio de la Coma, en Burjassot. Una temporada en cualquiera de estos barrios bastaría para curar a nuestro próceres y que estos volvieran a la normalidad.Joaquín Huguethttps://www.blogger.com/profile/11056384046800197422noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-7436002424561408843.post-53208609327377163302011-02-16T15:48:43.259-08:002011-02-16T15:48:43.259-08:00Abundando en el acrónimo, el apellido Weistor (sin...Abundando en el acrónimo, el apellido Weistor (sin hache) también significa en alemán "la puerta de la sabiduría". Si bien este título tiene extrañas connotaciones cabalísticas nada apropiadas para un caballero ario como Himmler. Considerando que éste fuera duro de oído y no le sonara este apellido a batiburrillo judío, existían una sectas gnósticas, los cainitas, que creían que la mejor forma de conocer a la divinidad era degradarse moralmente hasta alcanzar cotas infames. Y en estas artes singulares nuestro caballero- pederasta y maltratador- era un avisado maestro. Algunas de estas sectas adoraban a Judas, pues sin él no se habría producido el advenimiento del Mesías. En realidad este mistagogo abrió las puertas de la infamia con Himmler, Rosenberg y el cultísimo doctor Goebbels, y sin él quizás no habríamos disfrutado de ese salvapatrias teutón con voz de grulla austríaca. Ignoro si completó el círculo vendiendo a los propios jerifaltes nazis o al propio Hitler en picadillo, pero eso ya es otra historia, motivo para una saga novelística digna de Snorri Sturlson.Joaquín Huguethttps://www.blogger.com/profile/11056384046800197422noreply@blogger.com